Si no fuera por ellos, no podría creer en el amor.
Si no fuera por ella, no me gustaría leer.
Si no fuera por él, no sería perfeccionista.
Si no fuera por ellos, yo no estaría aquí.
Si no fuera por ella, probablemente sería peor de lo que soy.
Si no fuera por él, habría tenido mil cien trabajos de manualidades sin terminar.
Si no fuera por mis Tatas la comida sería menos rica, las reuniones familiares más incómodas, el trabajo mucho más triste, la responsabilidad una obligación mucho más pajera, la fe una cuestión de gente loca e ignorante, la vida mucho menos valiosa.
45 años de casados.
¿Cómo cresta lo lograron?
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1 de noviembre de 2009, 12:00
con amorsh no más pos.